Cómo afrontar el dolor del parto
Resumen del contenido
Dra. Inés Bombí
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Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus cuestiones sobre la salud del cuerpo y la mente.
¿Cómo es el dolor del parto?
El útero es un músculo que se contrae para dilatar el cuello del útero y empujar al bebé a través del canal del parto. Este dolor, al principio del trabajo del parto es leve, variable en intensidad e irregular. A medida que avanza el parto este dolor se hace más regular en intensidad y en intervalo.
Algunas mujeres lo describen como un dolor de regla o de ovarios fuerte, otras como dolor de riñones y otras como un dolor tipo cólico. Entre contracciones no se siente dolor, aunque en la fase final del parto se siente una desagradable presión en la vagina, y deben aprovecharse esos momentos para relajarse y descansar.
El miedo al dolor no permite una buena relajación que es muy importante para poder enfrentarse a él. Para vencer el miedo la información es una muy buena arma. Los cursos de preparto son una buena fuente de información ya que los imparten profesionales de la sanidad.
El ejercicio físico en la medida adecuada durante el embarazo también ayuda a fortalecer la musculatura y preparar el cuerpo para el trabajo de parto. El yoga es una buena herramienta para que algunas mujeres aprendan técnicas de relajación para utilizar entre las contracciones y descansar más.
Medicamentos para el dolor
Analgésicos
Algunos analgésicos pueden utilizarse para disminuir el dolor en el parto, sobre todo en las primeras horas, cuando las contracciones todavía no son muy regulares. Algunos analgésicos potentes pueden utilizarse con el parto más avanzado, pero pueden producir somnolencia en la madre.
Anestesia regional
La anestesia regional permite no sentir dolor desde la zona administrada hacia los pies. La anestesia peridural o epidural suele ser la anestesia regional más utilizada en el parto. Se coloca un catéter en la espalda, en contacto con la columna vertebral, que permite no tener dolor aunque pueda quedar la sensación de presión, pero manteniendo la fuerza para poder empujar en el momento del expulsivo. La dosis utilizada depende de cada paciente y puede variarse según las necesidades de cada una. El catéter permite que en caso de necesitar más dosis de anestesia, o por sentir dolor, o bien porque el parto se alarga y el efecto va desapareciendo, se pueda administrar más anestésico sin necesidad de volver a pinchar. La anestesia intradural se coloca también en la columna a través de la espalda pero no permite dejar un catéter, su efecto para disminuir el dolor es más rápido pero no puede administrarse más dosis posteriormente. Si una paciente está de parto con anestesia epidural y finalmente el parto termina en una cesárea se puede administrar más dosis de anestesia por el catéter para evitar el dolor de la intervención.
Anestesia local
En pacientes que no desean una anestesia regional o bien en las que esté contraindicada puede colocarse anestesia local si es necesario hacer una episiotomía y suturarla o bien si se produce un desgarro que precise reparación.
Anestesia general
En pacientes con una anestesia regional contraindicada y que precisen una cesárea o bien un parto instrumentalizado (fórceps, espátulas…) puede realizarse una anestesia general.
Algunas mujeres prefieren que en el caso de ser un parto normal sin complicaciones no se les administre ningún tipo de anestesia. En este caso es muy importante que hayan realizado preparación previa, sepan a qué tipo de dolor se pueden enfrentar y hayan aprendido técnicas de relajación que les permitan no perder el control durante el parto y poder disfrutar del mismo.
La mejor preparación posible
El momento del parto siempre genera temores e inquietudes entre las embarazadas, por eso muchos seguros de salud, como el Seguro de MAPFRE Salud, ofrecen a sus aseguradas programas de Preparación al Parto gratuitos en los centros médicos especializados incluidos en su guía. MAPFRE también ofrece programas de Planificación Familiar y de Reproducción Asistida.
Lo que debes saber…
- El parto suele ser doloroso pero el tipo de dolor, su intensidad y localización varía mucho de una mujer a otra.
- Es muy importante estar relajada para no sentir tanto dolor. Los cursos preparto, el deporte adecuado y el yoga pueden ayudar.
- Algunos seguros de salud incluyen en sus coberturas acceso gratuito a programas de preparación al parto, lo que supone una gran ventaja para las embarazadas.
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