Un hecho que cada vez tiene más repercusión en la economía de nuestro país hasta el punto de que los responsables e implicados en política agraria son conscientes de la necesidad de adaptar el mundo rural en su conjunto, a los cambios en el modelo agrario, y a las nuevas funciones sociales y de ocio que de ello se desprenden. Te comentamos algunas de las últimas tendencias en la industria rural, especialmente enfocadas al sector servicios.
- Turismo sostenible o ecoturismo. Uno concepto cada vez más en boga, que propone actividades turísticas respetuosas con el medio natural, cultural y social y que permite disfrutar de un positivo intercambio de experiencias entre residentes y visitantes.
- Gestión del turismo rural. Son muchas las Comunidades que coinciden en la óptima gestión que se está realizando de esta actividad, hasta el punto de que las tendencias apuntan a ampliar el nicho de mercado. Es decir, la industria se plantea alternativas como atraer a la tercera edad, que no suele tener limitaciones para viajar en los días laborales de entre semana.
- Mayor apoyo a las familias con niños y un nivel de accesibilidad adecuado. Además un aspecto que se prevé mejorar y que solo se contempla en un 40% de los establecimientos rurales es el hecho de proporcionar acceso a Internet entre sus servicios.
- Conciencia medioambiental. Porque cada vez buscamos más alternativas respetuosas con el medio ambiente: respirar aire puro o recorre un rincón de la naturaleza se ha convertido en un bien muy preciado para muchos viajeros.
En relación a esta concienciación con el medio ambiente y el entorno natural, las últimas tendencias en la industria rural también apuntan al desarrollo de conceptos la agricultura ecológica como un sistema de explotación agraria basada en la utilización óptima de los recursos naturales, sin emplear productos químicos de síntesis u otros organismos genéticamente modificados.
Y es que, si la tierra es uno de nuestros bienes más preciados, cuando hablamos de la industria rural esta apreciación se intensifica todavía más. Para proteger tu negocio agrario ante cualquier inclemencia del tiempo, es fundamental que cuentes con un seguro que proteja tus dependencias, sus contenidos y tus herramientas agrícolas o pecuarias, en caso de incendio, rayo, explosión, daños por agua o por cualquier otro siniestro que paralice tu actividad agraria, así como tus infraestructuras de turismo rural.
