Sí, en todas las circunstancias la respuesta a si se puede contratar el seguro si ya tenemos un nicho en propiedad, es rotundamente afirmativo. El consejo de los expertos no es solo que se pueda, sino que siempre se debe contar con el apoyo de un seguro de decesos para ahorrar dinero y sobre todo, aportar comodidad y tranquilidad al entorno familiar más próximo del titular del seguro.
Afrontar la muerte de un ser querido no es ningún caso una experiencia agradable ni fácil de llevar. Sin embargo, es una circunstancia que tarde o temprano se presenta en la vida. Las personas más previsoras o preocupadas, o las que lo han recibido en herencia; cuentan con un espacio donde depositar sus restos en el momento del fallecimiento y se preguntan si se puede contratar el seguro si ya tenemos un nicho en propiedad.
Los expertos en seguro de decesos son rotundos a la hora de contestar esta pregunta, se puede y se debe para completar la cobertura de todas las necesidades económicas y de asistencia que se derivan de un fallecimiento contratar un seguro de decesos.
Contar con un nicho en propiedad es, sin duda, una buena previsión y supone un gasto considerable a la hora de enterrar a un ser querido. No obstante, no es ni mucho menos el único ni el principal gasto que conlleva afrontar un entierro.
Trámites legales, certificados, ataúd, traslados, flores… a todos estos gastos; se suma la necesidad, en muchos casos, de apoyo psicológico para superar este trámite y superar la pérdida. Este apoyo profesional es especialmente necesario y útil para el círculo más íntimo y personal del fallecido: hijos, hermanos y padres, principalmente. Precisamente estas son el tipo de coberturas que deben incluirse en la póliza del seguro de decesos de una persona que ya cuenta con nicho en propiedad, pero que necesita completar sus coberturas.
Por lo tanto, sí, se puede contratar el seguro si ya tenemos un nicho en propiedad; pero al contratar la póliza de decesos es importante comunicarlo para que las coberturas del seguro contratado se adapten a esta circunstancia y den respuesta a las necesidades concretas del titular, adaptando también la prima.