El contenido de una vivienda hace referencia a todos los objetos que se encuentran dentro, ya sean de uso personal o general, como por ejemplo los muebles, los electrodomésticos, los objetos de decoración, los equipos informáticos, las pertenencias de valor, etc. Por ello, cuando se contrata una póliza es necesario hacer un inventario de todos estos bienes y calcular el contenido para que el seguro de hogar pueda cubrir sin problemas los daños que se originen en ellos en caso de siniestro.
¿Qué se entiende por contenido en un seguro de hogar?
Para poder calcular correctamente el contenido en tu seguro de hogar, es necesario saber qué se considera como tal. Pues bien, son todas las posesiones que tiene el asegurado dentro de su vivienda. Es decir, sería todo aquello que puedes llevar contigo si haces un cambio de casa: los muebles, electrodomésticos, objetos de decoración, equipos informáticos, ropa, enseres personales, alimentos, aparatos electrónicos y objetos de valor especial (joyas, colecciones, obras de arte o dinero en efectivo).
Saber exactamente que es el contenido y definirlo de manera adecuada es fundamental ya que servirá a tu seguro para calcular la prima y las indemnizaciones en el caso de que sea necesario aplicarlas.
¿Cómo calcular el contenido del hogar?
Calcular el contenido es muy necesario ya que, si algún bien no se incluye dentro del contenido asegurado, a efectos del contrato, no existe, lo que significa que la aseguradora no podrá indemnizarte por él en caso de siniestro. En este sentido debes saber que uno de los errores más habituales es declarar un valor de contenido inferior al real para reducir la prima, lo que se traduce en una indemnización más baja de acuerdo el valor de lo asegurado, o lo que se conoce como infraseguro. Por otro lado, valorar el contenido por encima del precio real puede llevarte a pagar una prima más alta, sin compensación adicional por ello. Por ello, desde MAPFRE te recomendamos tomarte tu tiempo para hacerlo, paso a paso, habitación por habitación y teniendo en cuenta todos los objetos que se encuentren dentro de ellas.
En primer lugar debes realizar un inventario completo de tu vivienda, en él debes recorrer todas las estancias de tu casa y apuntar qué objetos son los que quieres asegurar (muebles, electrodomésticos, utensilios de cocina, ropa…). A continuación valora cada artículo por su precio de reposición, es decir, utilizar el coste actual de cada objeto nuevo, sin descontar la depreciación. Por último solo habría que sumar el total por estancias para comprobar cuál es el valor del contenido de tu vivienda.
Qué incluye el contenido por estancias
Si no sabes por dónde empezar, te echamos una mano para que puedas hacer correctamente el inventario:
- En el salón: sofás, mesas, sillas, estanterías, alfombras, cortinas, lámparas, cuadros, equipos de sonido, televisores, videoconsolas, libros, adornos o vajillas decorativas.
- En la cocina: electrodomésticos (frigorífico, horno, microondas, lavavajillas), utensilios de cocina, muebles modulares, vajilla, cubertería y alimentos almacenados.
- En los dormitorios: camas, colchones, mesillas, armarios, ropa de cama, cortinas, ordenadores, tablets, objetos personales y ropa.
- En el baño: muebles auxiliares, espejo, mampara, alfombrillas, toallas y pequeños aparatos eléctricos.
- En el trastero o garaje: bicicletas, herramientas, equipaje, electrodomésticos secundarios o equipamiento deportivo.
Tus pertenencias son importantes, por ello, desde MAPFRE te recomendamos valorar el contenido siempre al precio de reposición y revisar la póliza periódicamente. Además, la cobertura de daños estéticos (contenido) protege los bienes asegurados cuando se producen desperfectos que afectan la armonía o estética de los elementos cubiertos, garantizando que la reparación mantenga la uniformidad dentro de tu hogar.
¿Qué pasa con las joyas y los objetos de valor especial?
Las joyas, relojes, colecciones o antigüedades suelen tener un tratamiento especial dentro de la póliza y también deben incluirse dentro del inventario. En MAPFRE tus objetos de valor están cubiertos hasta 3.000 euros por objeto. Cuando estos no están guardados en una caja fuerte, la cobertura queda limitada al 25 % de la suma asegurada de joyas, con un máximo de 6.000 euros por siniestro. Desde MAPFRE te ofrecemos la posibilidad de añadir esta cobertura adicional en el Seguro de Hogar Platino y Hogar Familiar. Debes tener en cuenta que en el caso de las joyas, pueden ampliarse los límites si se declara su valor de forma individual y se almacenan en caja fuerte para que la cobertura se ajuste al riesgo real y te garantice una protección completa frente a robo o siniestro.
Si quieres que el cálculo del contenido en tu seguro de hogar sea el adecuado, la mejor opción es revisar el valor al menos una vez al año o cada vez que realices una compra significativa. Es decir, cuando compres uno nuevo equipo informático, un electrodoméstico o un objeto de valor ya que si el contenido cambia, este debe actualizarse en tu póliza.




