Hoy en día, en la mayoría de las viviendas, sus ocupantes comparten espacio con un animal como mínimo. Al igual que el resto, este miembro de la familia también necesita unos cuidados y una seguridad que pasan sobre todo por la asistencia veterinaria cuando sea necesario y por responder ante los posibles daños, tanto físicos como materiales, que pueda causar a terceros. Por ello, para disponer siempre de estas garantías es crucial contar con un seguro para animales adaptado al tipo de especie.
Aunque las mascotas más comunes suelen ser perros y gatos, muchas personas se decantan cada vez más por convivir con otro tipo de animales exóticos, como por ejemplo aves, serpientes, lagartos o pequeños mamíferos. Dado que cada uno de ellos tiene unas necesidades concretas, no sólo es importante asegurarse de que es posible procurarle un entorno y atenciones adecuados, sino que las coberturas del seguro de animales también deben ser lo más completas posible ante accidentes o responsabilidad civil. Además, dado que el cuidado de estos animales no siempre es fácil, es fundamental que la póliza incluya un servicio telefónico de orientación veterinaria para saber cómo actuar en cualquier situación.
Por otro lado, otros seguros que tienen un tratamiento especial son los diseñados especialmente para caballos, ya sean de paseo o destinados a actividades deportivas. De este modo se puede contar con una protección doble, tanto para el animal como para el propietario. Generalmente, el principal beneficio de esta póliza es el seguro médico para estos animales en hospitales veterinarios de referencia.
Seguros para animales más comunes
Como comentábamos, los seguros para animales más usuales son los de mascotas, es decir, perros y gatos. En el caso de estos últimos, no es obligatorio contratar una póliza para ellos, aunque esta decisión puede ser la solución a más de un imprevisto que se origine en torno al minino. Respecto a los perros, únicamente es preceptivo contar con un seguro cuando se trata de una raza considerada potencialmente peligrosa, excepto en la Comunidad de Madrid donde es necesario disponer de la cobertura de responsabilidad civil para cualquier perro.
Entre las principales garantías de estos seguros se encuentran los daños al animal en caso de accidente, robo o extravío; asistencia médica para mascotas, estancia en residencia canina por hospitalización del asegurado y responsabilidad civil.
No obstante, para beneficiarse de estas coberturas, cada aseguradora establece una serie de requisitos, entre los que destacan cumplir con el calendario de vacunación, así como identificación con microchip y registro en el censo municipal del lugar de residencia en el caso de los perros. Además, los propietarios de mascotas también deben prestar atención a la edad máxima del animal para que la compañía se responsabilice del mismo. En este sentido, se suelen establecer restricciones para aplicar las coberturas de accidente y enfermedad cuando se sobrepasan los 7 años.
Aunque el seguro médico para animales es un servicio básico, también es conveniente revisar los puntos del contrato para conocer las posibles exclusiones en cuanto a medicación, tipo de enfermedad, tratamientos, periodo de carencia, etc. No olvides que una mascota asegurada es la mejor opción para cubrir sus necesidades de asistencia y protección, sin olvidar las obligaciones en cuanto a cuidados.