Cuando se decide adoptar una mascota, existen diferentes alternativas para hacerlo. Dos de las más comunes son acudir a una tienda especializada o a un centro de acogida de animales. Teniendo en cuenta que es preferible recoger antes que comprar, la opción que puede dar una segunda oportunidad a la vida de un animal que ha sido abandonado o maltratado es la segunda. Además, pagar un dinero a cambio de obtener una mascota es una práctica que puede acrecentar el tráfico irregular de algunas especies.
Aunque es cierto que las tiendas ofrecen una serie de garantías, no podemos olvidar que los animales no son un juguete, por lo que la adopción es la mejor vía para respetar sus derechos y conseguir que tengan la mejor consideración posible.
Al adoptar una mascota en un centro de protección se propicia la mejora de las condiciones de vida de dos animales: uno el que se acoge y otro el que va a ocupar el puesto del adoptado. Asimismo, aunque se tiende a pensar que las razas puras en el caso de los perros son las mejores, lo cierto es que las cruzadas presentan una mayor fortaleza y su origen les confiere un aspecto y carácter únicos. Además, en los sitios que albergan animales existe una amplia variedad de tipos para elegir el que mejor encaje con cada persona.
Otra ventaja de acoger un animal en lugar de comprarlo hace referencia al ahorro económico que supone. Como dueño de la mascota únicamente hay que preocuparse por cumplir con el calendario de vacunas, realizar la esterilización si fuera necesario y asumir otros gastos, como por ejemplo un seguro para mascotas donde se incluye la asistencia veterinaria, la responsabilidad civil, daños por accidente o sacrificio, entre otras coberturas.
Beneficios de adoptar una mascota a nivel personal
- Está demostrado que vivir con un animal de compañía reduce los niveles de estrés y ansiedad. Pasar un rato con la mascota puede ayudar a que los problemas cotidianos pasen a un segundo plano.
- En función del tipo de animal, como por ejemplo los perros, su presencia es una fuente de motivación para moverse más. Dado que es necesario sacarle a la calle a diario, esto obliga a que el dueño también haga lo mismo y realice ejercicio en cierta manera.
- Al adoptar una mascota es necesario establecer una rutina cotidiana, por lo que supone una tabla de salvamento para las personas que son bastante desorganizadas. La planificación es clave para cuidar adecuadamente a cualquier animal debido que éste tiene que satisfacer algunas necesidades básicas en momentos puntuales del día.
- Un animal de compañía, como su propio nombre indica, contribuye también a aminorar el sentimiento de soledad en aquellas personas que viven solas.
- Todas estas ventajas que tiene acoger un animal desembocan también en amortiguar la depresión.
- Según diferentes estudios, los perros y los gatos son una ayuda para reducir los efectos de esta enfermedad. El dueño debe involucrarse en cuidar de otro ser vivo y al mismo tiempo, puede embriagarse de su alegría y dinamismo.
- En el caso de los niños, adoptar una mascota les permite desarrollar relaciones más estrechas con otros de su misma edad o vínculos más fuertes con el resto de miembros de la familia. En definitiva, cuidar de un animal significa compartir, apoyar y trabajar, algo que se traslada posteriormente a cualquier ámbito de la vida diaria.