Son diferentes estudios los que ratifican este hecho, sobre todo cuando una persona trabaja en turno de noche durante un largo periodo. Aunque se tienda a pensar que el ritmo del organismo se puede acostumbrar a esta rutina, lo cierto es que el cuerpo humano está diseñado para descansar de noche y realizar la actividad por el día.
Por este motivo, quienes hayan trabajado alguna vez en horario de noche o lo hagan de forma habitual, habrán notado que en este intervalo de tiempo sus capacidades mentales y físicas se reducen, y en muchas ocasiones mantenerse despiertos se convierte en un auténtico logro. Sin duda, el desempeño de un trabajo en este turno requiere de un mayor desgaste de energía y concentración que con el paso del tiempo puede dar lugar a algunos problemas de salud.
Consecuencias de trabajar en turno de noche
Así, los principales efectos que un turno de noche causa en los trabajadores son:
- Cansancio excesivo tanto a nivel emocional como corporal.
- Reducción de la capacidad de concentración y memoria.
- Dolores musculares y articulares.
- Dolor de cabeza frecuente.
- Sueño de poca calidad e incluso insomnio.
- Malestar continuado.
- Trastornos digestivos.
- Alteración del sistema circulatorio.
- Cambios en el carácter que derivan en una mayor susceptibilidad, estrés y agresividad.
- Depresión en algunos casos.
- Envejecimiento prematuro.
¿Cómo mitigar los efectos de los turnos de noche?
En este plan también se incluyen no abusar del café y el tabaco, ya que constituyen dos factores de riesgo para la salud de cualquier persona, aún más en quienes suelen tener turno de noche.
Cuando llegue el momento de dormir es aconsejable hacerlo en un entorno adecuado, intentando cumplir siempre una rutina de sueño. Es conveniente bajar las persianas para que no entre ninguna luz en la habitación, así como quitar el sonido a cualquier aparato que pueda interrumpir el sueño.
Por último, es fundamental seguir las indicaciones de la empresa en cuanto a los horarios rotativos y días de descanso, sin olvidar contar con un seguro de salud para vigilar cualquier trastorno que pueda aparecer después de un largo periodo trabajando de noche.