En el caso de que no se cuenten con los conocimientos jurídicos básicos para saber cómo actuar, es fundamental ponerse en contacto con un abogado lo más rápido posible. Por norma general, cada letrado está especializado en una rama del Derecho concreta, por lo que conviene contratar los servicios de un profesional que tenga experiencia en el ámbito que nos incumbe, ya sea civil, penal o laboral. Esta figura puede ofrecer todo el asesoramiento y apoyo necesario para contestar a la demanda o bien realizar las acciones pertinentes de acuerdo al procedimiento de que se trate.
Tener el respaldo de un abogado o de una persona de confianza experta en leyes es crucial, ya que el mundo jurisdiccional se rige por unos plazos y unas condiciones que se deben cumplir para no agravar el problema.
¿Cómo responder ante una demanda?
Centrándonos en el supuesto de la contestación a la acusación, con este acto, la persona demandada ya está estableciendo su defensa y fijando sus alegaciones al hecho concreto. Para que esta acción surta efecto es imprescindible cumplir con el periodo de tiempo establecido para enviar el escrito y asimismo, el documento también debe reunir unos requisitos formales en cuanto a su estructura.
El plazo para remitir esta comunicación varía según el orden jurisdiccional de que se trate, aunque en la notificación de la demanda debe reflejarse el límite de tiempo para presentar la respuesta. En el caso de que exista alguna duda al respecto, es posible llamar al juzgado donde se ha tramitado la demanda para solicitar más información.
En cuanto al contenido de la contestación a la demanda es muy importante meditar cada frase al detalle. Por ello, la mejor opción en este caso es contar con la ayuda de un abogado que se encargue de la redacción. Además, este profesional también puede incluir en el escrito otros puntos que se consideren incorrectos en la demanda y que puedan dejar sin validez la misma.
En el supuesto de que el demandado admita todos o parte de los hechos que se le imputan en la demanda, en el escrito de contestación se especificará este aspecto. No obstante, lo más común es negar las acusaciones y para ello es preciso exponer los motivos en los que el acusado se basa para defender su postura.
Después de haber presentado la respuesta a la demanda, la tramitación continúa en el juzgado y en la mayoría de las ocasiones, se celebra una comparecencia para que ambas partes presenten pruebas e intenten llegar a un acuerdo. Si éste no tiene lugar, el juez, a la vista de las alegaciones de la acusación y la defensa, así como de las diligencias practicadas, dictará una resolución sobre el asunto.